A veces nos complicamos tanto la vida que nos volvemos locos.
Tratamos de que en el interior de cada botecito que compramos en la perfumería, haya un ungüento milagroso capaz de ponernos la buena cara de forma inmediata (yo diría “mágica”), que borre de un plumazo nuestras arrugas y además nos quite las manchas, nos de tersura, firmeza y, ya de paso, nos evite envejecer…
Soy la primera que me confieso adicta a las cremas con efecto inmediato y a las multi-función, porque mi vida transcurre muy deprisa y, en este momento, me hacen falta auténticos milagros en forma de cosméticos…
Pero a veces, hace falta volver a los orígenes y darnos cuenta de que una de las elecciones que con más cuidado tenemos que hacer es la de una buena crema hidratante.
Las personas que no han cumplido los 30, o los hombres que buscan productos simples, suelen buscar cremas hidratantes que, de verdad, funcionen.
Pero el resto, a veces nos perdemos entre tantos deseos (arrugas, manchas, firmeza…) y nos olvidamos de lo fundamental y, tal vez, del mejor regalo que podemos hacerle a nuestra piel: una hidratación duradera y eficaz.
Hoy os quiero hablar de una crema hidratante, una de las mejores.
No promete nada más que hidratación, pero esto lo cumple a la perfección: ULTRA FACIAL DE KIEHL´S.
Es unisex, super ligera y además aporta hidratación que se mantiene todo el día.
Aunque es uno de los productos de siempre, la que veis en la foto pertenece a la HERITAGE COLLECTION, edición limitada para conmemorar el 160 aniversario de la firma y que se acompaña de otros productos como Ultra Facial Moisturizer, Original Musk y el tónico a base de caléndula.
Junto con la crema estoy utilizando el tónico de caléndula y la verdad es que deja la piel perfecta durante todo el día.
El Original Musk es, junto con los otros tres productos, de los más emblemáticos de la firma y se dice que fue utilizado como “poción del amor” en los años 50 tras comprobarse sus efectos afrodisiacos…
Así que ya tenemos una nueva excusa para visitar Kiehl´s y para descubrir que los básicos, a veces, son la mejor de las elecciones.